Los mejores parajes de la Costa Brava
Platja d’Aro
Modernidad, cosmopolitismo y dinamismo
- Su oferta comercial, de alojamiento, de ocio y de restauración de alto nivel. El deporte, la cultura, la celebración de grandes eventos y de congresos y convenciones le acompañan. Su fachada marítima, con una playa de más de 2 quilómetros y pequeñas calas para descubrir, es envidiable.
- Los amantes de la naturaleza encontrarán des de una playa de grandes dimensiones, hasta pequeños rincones donde el agua y los arboles se tocan i dejan libre todavía un pequeño espacio para los bañistas más privilegiados. Unas playas que son espacios naturales privilegiados, cuidados por un programa de gestión de mantenimiento, seguridad y información que obtiene, año tras año, los máximos galardones.
- Espacios abiertos con múltiples posibilidades para practicar el senderismo y bicicleta de montaña, combinando así deporte y ocio. Diversos itinerarios, algunos aprovechando la adecuación de espacios ocupados antiguamente por las vías de tren, ofrecen ahora la posibilidad de disfrutar de rincones olvidados y de zonas de gran riqueza histórica y cultural, a cada paso o a ritmo de los pedales.
S’Agaró
Equilibrio entre arquitectura y naturaleza
Un oasis singular de acierto, previsión de futuro y respeto al paisaje. Se entiende silencioso sobre una colina rota de calas pequeñas, estrechas y pedregosas. La envuelve suavemente un camino de ronda que resulta paseo. Entre pinos y flores y acantilados se pueden contemplar todos los tonos de azul de nuestra particular Mar Mediterránea.
Castell d’Aro
Historia, tradición y encanto medieval
El Castillo de Benedormiens, la Iglesia de Santa Maria y las calles empedradas nos transportan a otros tiempos. El conjunto, conservado con criterio y sensibilidad, ha estado declarado Bien de Interés Nacional. Se complementa con la original, simpática y curiosa propuesta del Museo de la Muñeca.
Begur
Cultura y relax
Situado en el corazón del Emopordà, el pueblo de Begur y sus playas configuran uno de los rincones más maravillosos de la Costa Brava. Su término municipal está formado por un conjunto de colinas llamadas Macizo de Begur, y un extenso litoral, bañado por el Mar Mediterráneo. Tanto el casco antiguo de Begur, formado por múltiples monumentos que han quedado como legado de los momentos más significativos de su historia; como el pequeño núcleo románico de Esclanyà, o las ocho calas y pequeñas playas que pertenecen a Begur, forman un conjunto y un entorno paisajístico inigualables.
Torroella de Fluvià
Historia y tradición payesa
Situado justo en el centro de la plana de l’Alt Empordà se encuentra este pequeño y encantador pueblo, lleno de rincones preciosos y magnífica gente. Su entorno está formado por Vilamacolum, Sant Tomàs de Fluvià y Torroella de Fluvià que forman un conjunto paisajístico inigualables. Muy cerca de la playa de Sant Pere Pescador, conservada prácticamente virgen y sin edificaciones, muy conocida por los amantes del surf y el kitesurf. Los Aiguamolls de l’Empordà y el Museo Dalí de Figueres son dos de las principales atracciones turísticas que puedes encontrar a poca distancia del pueblo.